Las zonas azules son regiones específicas en el mundo que han captado la atención de científicos y expertos en longevidad. Esto, debido a la notable longevidad de sus habitantes. Estos lugares incluyen:
- Okinawa en Japón
- Cerdeña en Italia
- Nicoya en Costa Rica
- Icaria en Grecia
- Loma Linda en California
- Estados Unidos
Los habitantes de estas zonas no solo viven más años, sino que también disfrutan de una salud física y mental envidiable. No está relacionado con altos ingresos económicos ni con servicios sanitarios especializados. Lo que ha generado un interés profundo en estudiar sus hábitos y estilos de vida. Se le llamó zonas azules porque sus primeros investigadores utilizaron el rotulador azul para señalarlas. Presentan una mayor cantidad de centenarios en proporción, comparados con los países más desarrollados, tanto social como económicamente.
Uno de los factores comunes en estas zonas azules es la dieta. Las personas en estas regiones tienden a consumir alimentos frescos, naturales y basados en plantas, con una alta ingesta de:
- Frutas
- Verduras
- Legumbres
- Granos enteros
Además, suelen evitar los alimentos procesados y las carnes rojas, optando por fuentes de proteínas más saludables como el pescado y las legumbres. La moderación en la alimentación, como comer hasta sentirse un 80% lleno, es otro hábito que contribuye a su longevidad.
Factores clave:
Además de la dieta, otros factores clave incluyen una vida social activa, la práctica regular de ejercicio físico, y un propósito. Las comunidades en las zonas azules valoran las relaciones familiares y sociales, lo que proporciona un apoyo emocional constante. El ejercicio no se limita a rutinas intensas, sino que está integrado en la vida diaria a través de actividades como:
- Caminar
- Trabajar en el jardín
- Realizar tareas domésticas de preferencia manualidades
Tener un propósito claro en la vida, ya sea a través del trabajo, hobbies o contribuciones comunitarias, ayuda a mantener una mentalidad positiva y resiliente.
Hay variables que resaltar en las zonas azules. Solo el 20 por ciento de la longevidad se relaciona a factores genéticos y el 80 por ciento al estilo de vida. Se le suele llamar la regla del 80/20. Es muy interesante saber que en Icaria Grecia la tasa de incidencia de Cáncer es menor al 20%. De enfermedades cardiovasculares menores del 50%, la incidencia de demencia y depresión son nulas. En Okinawa (japón) muy bajas tasas de arteriosclerosis y Cáncer de estómago.
Estos elementos combinados crean un entorno propicio para una vida larga y saludable. El estudio de las zonas azules no solo ha revelado secretos sobre la longevidad. Sino que también ha inspirado a personas de todo el mundo a adoptar hábitos más saludables. Algunas comunidades han comenzado a implementar programas basados en los principios de las zonas azules. Promoviendo cambios en la dieta, el ejercicio y la vida social para mejorar la calidad de vida de sus habitantes.
Por ejemplo, en algunas ciudades se están creando jardines comunitarios donde las personas pueden cultivar sus propios alimentos frescos, promoviendo así una alimentación más saludable. También se están desarrollando espacios públicos y rutas peatonales para fomentar la actividad física diaria. Y, se están organizando eventos sociales para fortalecer los lazos comunitarios y combatir la soledad.
Además, las escuelas están incorporando programas que enseñan a los niños sobre la importancia de una dieta equilibrada y la actividad física. Al mismo tiempo que fomentan el desarrollo de habilidades sociales y emocionales. Estos esfuerzos no solo buscan aumentar la longevidad, sino también mejorar la calidad de vida desde una edad temprana.
En conclusión, las zonas azules comparten características que refuerzan estilos de vida saludable como actividad física natural y cotidiana, prioritariamente:
- Manualidades
- Propósito de vida
- Rutinas para combatir el estrés
- Bajo consumo de alcohol
- Dieta equilibrada primordialmente basada en plantas
- Solo llenarse hasta el 80 por ciento
- Actividades en comunidad
- Importancia de la familia
- Redes sociales
Las zonas azules no tienen como requisito edad de inicio ni edad de terminación. Podría decirse desde el vientre materno hasta el último día de vida. Cualquier persona que desee mejorar su estilo de vida, su calidad de vida puede pertenecer a una zona azul. Solo hay un norte y es colaborar con el grupo tener el corazón abierto para aportar y recibir de la comunidad. las zonas azules nos ofrecen valiosas lecciones sobre cómo vivir de manera más plena y saludable. Al adoptar algunos de estos hábitos en nuestra vida diaria, podemos aspirar a disfrutar de una mayor longevidad y bienestar, creando comunidades más fuertes y felices.
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